
¿Estás pensando en comprar o vender una propiedad? Si es así, debes estar consciente de que, además del precio de venta, existen otros gastos asociados a la transacción. Algunos de estos costos pueden ser fácilmente identificables, como los impuestos y las comisiones inmobiliarias. Sin embargo, hay otros gastos ocultos que podrían sorprenderte y afectar tus finanzas si no los tienes en cuenta desde el principio. A continuación, te presentamos algunos de estos gastos ocultos en una transacción inmobiliaria.
1. Gastos notariales
La intervención de un notario es fundamental para formalizar la compraventa de una propiedad. Este profesional se encarga de redactar y verificar la escritura pública, así como de inscribir la transacción en el Registro de la Propiedad. Por sus servicios, el notario cobra unos honorarios que varían según su ubicación y el valor del inmueble.
2. Impuestos asociados a la compra
Al adquirir un inmueble, deberás hacer frente a varios impuestos. Uno de ellos es el Impuesto sobre Transmisiones Patrimoniales (ITP), que se aplica a las viviendas usadas y su porcentaje varía dependiendo de la comunidad autónoma en la que te encuentres. En el caso de viviendas nuevas, tendrás que pagar el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA) y el Impuesto sobre Actos Jurídicos Documentados (AJD).
3. Tasación del inmueble
Si vas a solicitar una hipoteca, es probable que el banco te exija una tasación del inmueble para determinar su valor real y el importe máximo que te concederá. Este proceso implica la intervención de un tasador profesional, cuyos honorarios oscilan entre 200 y 600 euros, según la entidad y la vivienda.
4. Gastos de gestoría
Las gestorías se encargan de realizar trámites administrativos relacionados con la compraventa, como el pago de impuestos o la inscripción en el Registro de la Propiedad. Aunque no son obligatorias, es común contratar sus servicios para agilizar el proceso y evitar errores. Los gastos de gestoría pueden variar entre 300 y 1000 euros, dependiendo del trabajo realizado y la localidad.
5. Comisión de apertura en caso de hipoteca
Al contratar una hipoteca, es posible que el banco te cobre una comisión de apertura. Esta tarifa cubre los gastos derivados del estudio y concesión del préstamo. Su importe suele ser un porcentaje del capital prestado (entre 0% y 2%) y puede llegar a representar una suma importante.
6. Gastos asociados al vendedor
Aunque gran parte de los gastos asociados a una transacción inmobiliaria corren por cuenta del comprador, el vendedor también debe hacer frente a ciertos costos. Entre ellos se encuentra la plusvalía municipal, un impuesto que grava el incremento del valor del suelo. Además, si el vendedor ha recurrido a una agencia inmobiliaria, deberá abonar la comisión correspondiente.
7. Gastos de mantenimiento y comunidad
Tras adquirir una propiedad, no debes olvidarte de los gastos de mantenimiento y comunidad. Estos incluyen el pago de servicios como la limpieza, el mantenimiento de áreas comunes o la recogida de basuras. Aunque no son parte directa de la transacción inmobiliaria, es fundamental tenerlos en cuenta para calcular el costo total de tu inversión.
Conocer estos gastos ocultos te permitirá planificar mejor tu presupuesto y evitar sorpresas desagradables durante la transacción inmobiliaria. No dudes en consultar a profesionales del sector para obtener información detallada sobre cada uno de estos costos y asegurarte de que estás tomando las decisiones correctas en tu compra o venta.